¿Necesitamos tener información o conocimiento?, ¿qué es más importante? Desde hace años se han puesto de moda lo que se conoce como competencias, sin embargo, la forma en la que éstas han entrado en los Centros de Enseñanza ha sido la peor posible: por Decreto, sin formación y sin herramientas.
Sin embargo, en un mundo en el que la información no es lo fundamental (cualquiera la tiene a un solo click), es determinante que enseñemos a nuestros alumnos a buscar la información y, sobre todo, a discriminarla. Hasta ahora el maestro era aquella persona conocedora de los datos, la que poseía una cabeza privilegiada, la que sabía. No obstante, hoy en día, cualquier persona puede tener más información de un tema con un solo golpe de ratón que cualquier profesor pero, ¿es eso hoy lo importante?
La respuesta, según mi opinión, es contundente: NO. Hoy en día, lo importante no es la información, el valor de la misma se ha trasladado a otro ámbito. Antes éste, se encontraba en el profesor; ahora se ha trasladado al usuario, es decir, al alumno pero, ¿qué valor tiene entonces el profesor? Enseñar, como siempre, pero antes enseñaba información, ahora, cómo buscarla y cómo decidir con cuál quedarnos y, para muestra, un vídeo.
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